En Duchamania son muchos las peticiones para cambiar la bañera por plato de ducha, ya sea por la falta de espacio en el cuarto de baño o por comodidad, como en el caso de la gente mayor. No siempre ha sido así, todos hemos visto en series y películas como disfrutaba la nobleza de la época en las antiguas bañeras de patas de un agradable baño de espuma.

El equipo de Duchamania quiere darte a conocer algo más sobre estas bañeras y aprovecha si puedes conseguir emular uno de esos momentos con tanto glamour.

Seguramente hayas visto este tipo de bañeras en muchas películas, puesto que en el pasado fue un elemento distintivo en los baños de las casas nobles, constituyendo por si solo un bonito elemento decorativo aparte de su función de baño.
La calidad de fabricación de este tipo de piezas era extraordinaria para su época, realizadas en hierro fundido de una sola pieza y recubiertas con una gruesa capa de cerámica, su robustez era una de sus principales bazas.
A partir del primer cuarto del siglo XX (1.925) su uso fue decayendo por el encarecimiento de los materiales y por la sustitución de este tipo de piezas por otras mas ligeras y económicas destinadas a la construcción de viviendas en serie, actividad que ya empezaba a ser importante.
A partir de 1950 este tipo de piezas prácticamente ya no se comercializan, puesto que las fundiciones dejan de fabricarlas al no serles rentable ya su venta.
En los baños en los que se realizaban reformas muchas de estas piezas fueron retiradas por su mal estado, puesto que no existía forma alguna de recuperarlas, y así muchas de estas piezas acabaron sus días oxidandose en chatarrerías, sirviendo de bebedero para el ganado o fundidas de nuevo.
Las patas sirvieron en ocasiones como pisapapeles o como elemento decorativo en estantes.
En España, desde hace unos pocos años, se empieza a valorar estas bañeras, tanto por su vistosidad como por su antigüedad, y es frecuente verla en anuncios publicitarios como signo de refinamiento y distinción.

Actualmente se comercializan modelos que emulan a las antiguas con la tecnología actual como la de la foto de Victoria Albert